Noviembre y la despedida de Júpiter en Sagitario, Resolviendo tensiones entre voluntades… y 2020??

El 3 de diciembre de 2019 Júpiter se traslada a Capricornio. En su paso por Sagitario (8 de Noviembre 2018 a 2 diciembre 2019) más allá de las distorsiones e ilusiones que produjeron las cuadraturas que tuvo con Neptuno, finalmente comprendimos que la verdad no es una mera construcción de la voluntad, sino que depende de la realidad y que eso es algo que no puede ocultarse ni dejar de ser tenido en cuenta. El inmenso proceso de transformación al que hemos estado sometidos requerirá de un enorme trabajo de construcción y estabilización que será una de las tareas de Júpiter por Capricornio. Desde Sagitario se planteó una expansión de consciencia y profundo aprendizaje, si hemos estado receptivos a la acción de finalización de las estructuras limitantes (apoyando el trabajo del Nodo Sur-Pluton y Saturno desde Capricornio), descubriendo y confiando en las propias capacidades y recursos internos; como la peligrosa faceta de afirmarnos y atrincherarnos sobre nuestras propias concepciones y principios como refugio de sustentación al sentir que la realidad en la que nos manejamos, los afectos, espacios y momentos de relajación uno a uno se fueron esfumando, cambiando o se encuentran totalmente resquebrajados, ya sea en la realidad o dentro nuestro. En ambos casos se produjo un enfrentamiento de voluntades y distanciamiento emocional con otros debido a un infinito sentimiento de protección interna ante el sentimiento de extrema vulnerabilidad, con mucha desconfianza ante la interpelación de la presencia de las necesidades de un otro. Todos nos estamos protegiendo, todos nos sentimos amenazados. Tenemos poco espacio interno para compartir. En algún lugar nos sentimos drenados.

Noviembre es un mes en el que no hay mucha posibilidad de acuerdos, ni encuentros porque estamos muy introspectivos haciendo un balance interno intentando separar las propias necesidades de la que no lo son. Las relaciones en toda su magnitud (personales, laborales, familiares) están en una profunda evaluación para determinar cuánta energía estamos dispuestos a dedicarles o si son posibles o no (dependerá de la capacidad de transformación que esa relación tenga). Júpiter desde Sagitario busca el sentido, y si no lo encuentra no permanece. Lo que se presenta a partir del 10 de Noviembre es un indicio fuerte de lo que será el escenario del 2020, Jùpiter hará un sextil Marte y Saturno un sextil a Neptuno marcando un tiempo de aprender a poner la energía donde se construye y no de sentirnos limitados en nuestra expresión. Los condicionamientos deben ser consensuados, no impuestos ni solapados. Esto estará muy vigente el año próximo y con mayor rigurosidad a partir de Junio. Pero para ese momento aun falta mucho, y sobre todo la fuerte influencia de la conjunción de Plutón y Saturno de Diciembre a Enero, y la triple conjunción Plutón, Saturno, Júpiter de Abril.

Preparemos la despedida de Júpiter de Sagitario para aclararnos internamente ya que con la Luna en Tauro del 12 de Noviembre trae excelentes alineaciones para finalizar un proceso interno de valoración, de concreción y finalización de proyectos. Y luego para cerrar el mes la Luna Nueva en Sagitario del 27 de Noviembre con Júpiter conjunción Venus para permitirnos una apertura desde un espacio de mayor libertad y objetividad y preparándonos para el eclipse del 26 de Diciembre (Júpiter conjunción Sol-Luna), porque a partir de allí las relaciones que no se transformen no tendrán chances de permanecer por mucho tiempo. Lo que viene es un tiempo de constancia en la construcción, no hay espacio para lo que no esté en esa dirección. Esto vale para todos los ámbitos de la vida.

Mariana

Júpiter en Sagitario tiene dos caras. Temporada eclipses Cáncer Capricornio

Júpiter es el planeta que todos tomamos como el benefactor mayor pero como todo tiene dos caras, su cara más benévola es la que te brinda beneficios oportunidades expansión. Una mente abierta para trascender los propios límites. Podríamos llamarlo el planeta que te brinda regalos. Pero hay otra cara de Júpiter que está vinculada con el goce y el disfrute que esconde o enmascara el «no darse cuenta» de lo que por debajo está sucediendo. Toda expansión requiere de haber hecho un profundo análisis de la situación real y de estar muy seguros del sentido y de la trascendencia que tienen nuestras acciones,  sobre todo en el ámbito del pensar y del actuar.  Toda trascendencia implica saber de un límite al cual trascender.  No podemos trascender lo que no conocemos. En el paso de Júpiter por Escorpio el trabajo fue hacernos conocer nuestra parte más oculta,  nuestros deseos más olvidados en el deseo del otro,  nuestras ganas de compartir Pero para esto fue necesaria una limpieza muy profunda. Es  por esta razón que era imprescindible llegar a este momento sin deudas,  ya sean emocionales, como materiales, económicas o  kármicas. El lado oscuro o la otra cara de Júpiter en Sagitario es la de una suerte de fundamentalismo que poco a poco irá tomando forma. Ya comenzamos a notar fuertemente la exclusión de lo distinto como un otro Invasor y violento. Esta manifestación de Júpiter en Sagitario es el producto de no haber comprendido que la libertad, la verdad y la trascendencia están íntimamente unidas. Van de la mano, no hay opción. Cuando el miedo a lo oculto,  que podríamos verlo proyectado sobre la construcción de un sujeto social, etnia o cultura, en el fondo no deja de ser una construcción personal o social que cumple el rol de justificación de un estatus quo que se sostiene su permanencia sobre la diferencia., la división y la condena. Pluton, el gran transformador y Saturno el gran constructor de estructuras, poco a poco se irán acercando. Este encuentro en el signo de Capricornio ponen en jaque las estructuras vigentes. Esta dupla tendrán sus Eclipses. Momentos en  los que las estructuras vigentes se verán confrontadas con las reales necesidades personales El desafío del año 2019 se dirime en la encrucijada de permanecer justificando lo que está extinguiéndose, a través de la construcción de un otro enemigo y temible; o cuidamos el colectivo como una unidad propia en la que sentimos pertenencia y donde podemos desarrollarnos. Las opciones se bifurcan entre pagar un altos precio moral, éticos y vital sosteniendo lo insostenible, o ampliamos nuestras fronteras mentales ante la transformación plutoniana (incrementada por el ingreso de Urano a Tauro el 26 de marzo). Estamos comenzando a vivenciar una época muy dura y crítica. Época de finales, que requiere de todo el potencial de un nuevo paradigma. No son tiempos de confrontación, sino de consciencia sobre nuestras elecciones. El año 2020 está cerca, pero el resultado dependerá de la liberación de deudas que hayamos procesado en 2018 y de la acción dirigida al cuidado de lo que nos nutre y nos permite crecer. Esto es el 2019.

Links recomendados: Verificar lo que somos. 

Link recomendado: Previeux  2019

Mariana

2019, Saber dónde estamos, saber lo que queremos desarrollar y en qué queremos comprometernos. Encontrar pertenencia.

2019 es un año para formar estructuras. No va a ser un año fácil, porque la realidad se hará presente en cada momento. Muchas veces deberemos confrontar nuestra estructura de vida con nuestros deseos, para realizar los ajustes necesarios, porque sentirnos bien con lo que somos será el motor que nos impulse a dinamizar nuestra realidad. Una mirada hacia las estructuras del pasado nos va a permitir resolver de una manera totalmente distinta lo que no está resuelto o alejarnos definitivamente. Porque será imprescindible que lo superfluo se elimine. Será un año de trabajar en forma consciente sobre nuestros proyectos. De retomar el poder que delegamos en otros. De ser responsables por nuestra vida y el cuidado de los más cercanos. El sentido de unión será muy importante y fuerte con lo que nos es familiar. La energía femenina en su mejor performance será la protagonista y el cimiento de construcción. Dar atención a lo instintivo nos conecta con nuestra capacidad de generar bienestar para nosotros y los que nos rodea. Es un año de fuerte e intensa maduración, porque muchas veces sentiremos que nuestra supervivencia está en juego. Las instituciones tal como están funcionando ya no son referente, y la tarea es reconstruir referencia y pertenencia desarrollando integridad personal. Los vínculos sinceros y que sean movidos y sostenidos por el sentido, tendrán su espacio para crecer, nutrirse y elevarse como vínculos fuertes y permanentes. Abrirse a nuevas alternativas, explorar opciones, pero con el suficiente cuidado de encontrar allí la panacea. Ni bien intentemos evadirnos de la realidad algún sacudón nos hará volver a través de reflexiones internas. La emoción estará a flor de piel. Enero, Junio y Octubre pueden ser meses de mucha confusión, lo ideal sería no caer en desilusiones o falsas expectativas, sino utilizar esos momentos para replantear tu camino. Qué tienes que modificar?, qué te da miedo?, A qué verdad sobre ti y los demás tendrías que abrirte?. Acá estamos, iniciando un año de 5 eclipses, que nos llevan a trabajar con nuestra emoción. A animarnos a encontrar un lugar real de pertenencia, a alejarnos de lo que creíamos estable y duradero para abrirnos a la difícil y maravillosa idea de ser, cuidar y nutrirnos a nosotros con otros.

Buen inicio de año.

Si te interesa conocer más sobre vos y cómo influye este año podés escribirme biografiadelmovimiento@gmail.com o 5491154897545.

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Cariños…… Mariana

Júpiter en Sagitario tiene dos caras

Júpiter es el planeta que todos tomamos como el benefactor mayor, pero como todo, este planeta también tiene dos caras.  Su cara más benévola es la que te brinda beneficios, oportunidades yy expansión. Es la apertura mental que nos permite trascender los propios límites. Podríamos llamarlo el planeta que te brinda regalos. Pero hay otra cara de Júpiter que está vinculada con el goce y el disfrute que esconde o enmascara el «no darse cuenta» de lo que por debajo está sucediendo. Toda expansión requiere de haber hecho un profundo análisis de la situación real y de estar muy seguros del sentido y de la trascendencia que tienen nuestras acciones, sobre todo en el ámbito del pensar y del actuar. Toda trascendencia implica saber de un límite al cual trascender. No podemos trascender lo que no conocemos. En el paso de Júpiter por Escorpio el trabajo fue hacernos conocer nuestra parte más oculta, nuestros deseos más olvidados en el deseo del otro, nuestras ganas de compartir. Pero para esto fue necesaria una limpieza muy profunda. Es por esta razón que era imprescindible llegar a este momento sin deudas, ya sean emocionales, como materiales, económicas o kárnicas. El lado oscuro o la otra cara de Júpiter en Sagitario es la de una suerte de fundamentalismo que poco a poco irá tomando forma. Ya comenzamos a notar fuertemente la exclusión de lo distinto como un otro invasor y violento. Esta manifestación de Júpiter en Sagitario es el producto de no haber comprendido que la libertad, la verdad y la trascendencia están íntimamente unidas. Van de la mano, no hay opción. Cuando el miedo a lo oculto, que podríamos verlo proyectado sobre la construcción de un sujeto social, etnia o cultura, en el fondo no deja de ser una construcción personal o social que cumple el rol de justificación de un estatus quo sostiene su permanencia sobre la diferencia, la división y la condena. Plutón, el gran transformador y Saturno el gran constructor de estructuras, poco a poco se irán acercando. Este encuentro en el signo de Capricornio ponen en jaque las estructuras vigentes. Esta dupla tendrán sus Eclipses. Momentos en los que las estructuras vigentes se verán confrontadas con las reales necesidades personales El desafío del año 2019 se dirime entre si permanecemos justificando lo que está extinguiéndose, a través de la construcción de un otro enemigo, y temible o cuidamos el colectivo como una unidad en la cual podemos desarrollarnos. ¿Pagamos altos precios morales, éticos y vitales, sosteniendo lo insostenible? o ampliamos nuestras fronteras mentales ante la transformación plutoniana (incrementada por el paso de Urano por Tauro) o nos hacemos conscientes de estar vivenciando una época muy dura y crítica de finales, que requiere de todo el potencial de un nuevo paradigma. No son tiempos de confrontación, sino de consciencia sobre nuestras elecciones. El año 2020 está cerca, pero el resultado dependerá de la liberación de deudas que hayamos procesado en 2018 y de la acción dirigida al cuidado de lo que nos nutre y nos permite crecer. Esto es el 2019.
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Mariana