Cómo se rescata lo que somos en sociedades excluyentes? En tiempos de fin de ciclos la encrucijada se presenta en la paradoja de ser uno mismo enfrentado a lo que se propone como única posibilidad viable de pertenencia. Estamos finalizando una temporada en la que pertenecer implica aceptar. El paradigma de estos días transcurre en no sentir la exclusión por no sentirte partícipe de un sistema que enarbola principios morales basados en ilusiones alejados de la realidad cotidiana. Pertenecer a una comunidad implica responder a un sistema jurídico, que debiera garantizar el bien común y los derechos básicos de habitabilidad en una comunidad. Pero los Nodos están finalizando su estancia en Leo y Acuario conjuntamente con Júpiter finalizando su paso por Escorpio. Todo para pasar a otro estadio en el que esas estructuras ya no tienen validez, porque empezaremos a cuidar lo propio y todo aquello que nos nutre y en lo que sentimos familiaridad, porque finalmente es allí donde podemos desarrollar nuestro potencial. La oposición de Urano con Venus al mismo tiempo en que Mercurio Retrógrado se unió con Júpiter en Escorpio nos brinda la posibilidad de vivenciar tan profundamente la contradicción entre el medio en que vivimos y nuestras necesidades de pertenencia, que es un buen momento para hacer una pausa y redireccionar. ¿ACEPTAMOS NUESTRA INTUICIÓN O NOS AMOLDAMOS A UNA REALIDAD QUE NOS PRESENTAN COMO LA ÚNICA POSIBLE? Tengamos en cuenta que Mercurio entró en Sagitario, y las verdades no quedarán calladas. Tenemos que saber que con Júpiter ingresando en Sagitario el 8 de noviembre, las posiciones ideológicas de aquellos que no se han transformado y enfrentado consigo mismo cuando Júpiter transitó Escopio, tenderán a sostener sus posturas como absolutas. Pero esta no es la misión de Júpiter en Sagitario. La versión más elevada de este signo es ampliar fronteras, tanto mentales como de saber. Y el saber no es cerrado y obtuso, sino que es posibilidad de apertura a la inclusión de otros. Enfrentemos lo que somos para poder trascenderlo y no quedarnos encerrados en justificar sin ver otras perspectivas. Toda idealización, tendrá su cuota de frustración. Cerremos ciclos.
Mariana