La Luna Llena en Escorpio de este año 2017, sigue la temática del año. Con la Luna Nueva de Tauro del año pasado la propuesta fue seguir nuestro corazón y nuestro cuerpo para encontrarnos a nosotros mismos, con la Luna Nueva en Tauro de este año 2017  fue y sigue siendo el comienzo de ciclos estables. La contraparte es esta Luna Llena en Escorpio del 10 de mayo, que apoya e incita a la propuesta de fines de abril, pero con ciertas particularidades.

El escenario es que Juno que se encuentra en Capricornio unido a Plutón, inicia un periodo de revisión marcando la inexorabilidad de la transformación del compromiso en las relaciones, y el ponerlas a consideración y evaluación para discernir en qué medida y cómo siguen o no formando parte de este nuevo estado de compromiso que estamos adquiriendo básicamente con nosotros como proyecto de nosotros mismos.  Fieles a nuestros anhelos que serán remarcados por el sextil de Neptuno al Sol del 7 de mayo, pero que sufrieron un estado en tensión y que han sido (y siguen en algún modo) siendo boicoteados por nuestra propia propensión a retenernos en situaciones conocidas de estabilidad a las cuales ya nos posible retornar, por la oposición del 5 de mayo que se perfeccionó entre  Marte y Lilith que día a día se irá disolviéndose hasta el 15 de mayo. Esta oposición estuvo apoyada por Ceres, indicador de que estuvo dirigida a ponernos en contacto con nuestra otra cara (Lilith),  y de que debemos darnos la oportunidad y permitirnos (si es que somos conscientes de esto -Urano-Mercurio-), del respeto y del cuidado que tenemos que darnos para poder seguir acompañando nuestros procesos ahora que Vesta y el Nodo Norte están en Leo.

Esta Luna en Escorpio (10 de mayo 2017), está plena de emotividad y sensibilidad ante la consolidación de nuestro potencial y valoración, unida a la real y cruda evaluación de todo aquello que ya no nos puede acompañar cuando tendemos hacia aquello que nos consolida. El límite de esta Luna es muy delgado y puede entenderse e interpretarse como proceso de individualismo ególatra centristra, pero no es así, a pesar de esta primera impresión, no lo es de ningún modo. Es un muy buen periodo para desde el propio conocimiento y  valoración reformular relaciones auténticas, que son las únicas posibles.  En las relaciones y en la vida, el Otro se presenta como un otro que no soy yo, y para poder establecer relaciones genuinas es imprescindible hacerlo desde la intimidad del compromiso con cada uno en su existencia individual. El otro no es un otro Yo, sino un Otro. Desde este posicionamiento es que podemos aproximarnos, responsabilizarnos y construir en relación.

Soy totalmente solo; así, pues, el ser en mí, el hecho de que existo, mi existir, es lo que constituye el elemento absolutamente intransitivo, algo sin intencionalidad ni relación. Todo se puede intercambiar entre los seres, salvo el existir. (Emmanuel Lévinas. «Ética e infinito»).

Es muy importante esta Luna, que está relacionada con cosas que dejamos atrás o terminaron a fines de febrero  y a su vez conectada con la próxima Luna Llena del 9 de Junio.

El ciclo de los movimientos es un continuo movimiento ascensional desde y hacia nosotros mismos,  en relación con Otros y con el Mundo y hacia allí vamos.

Cualquier consulta sobre este tema o de procesos individuales por signo pueden dejar comentarios o escribir por mail: biografiaelmovimiento@gmail.com que responderé con mucho gusto.

Buena Luna, Mariana