Todos los años se unen el Sol con el Nodo Norte y se opone al Nodo Sur, pero en esta oportunidad es en vísperas de un eclipse importante que se da en Leo, regido por el Sol. Por tanto es un momento de concientización, de afianzamiento de objetivos, de estar alineado con uno mismo.

Hay otras alineaciones que acompañan la posición solar, y es la de Júpiter tensionando a Venus. Esta posición conflictiva, es la que otorga la convicción o la confrontación sobre aquellas situaciones, personas, sentimientos en los que quedamos retenidos, y que no podrán continuar en el nuevo camino que comienza. O por el contrario buscaremos reafirmar todo aquello que merece nuestra más real, concreta y apasionada energía amorosa desde la creación y la posibilidad.

Todo Eclipse, como todo acontecimiento nos enfrenta a la resolución. La diferencia del eclipse es que no os da opción de distracción. Nos insta a resolver, por eso es importante esta posición de Júpiter con Venus, porque nos insta a resolver sobre lo que está oculto en nuestro inconsciente. Y ésta es la diferencia más importante.

Este mismo día la Luna ingresa a Cáncer para encontrarse con Venus el día 18 activando completamente la confrontación y nuestra voluntad por optar por lo que nos es más propio, y fundamentalmente sobre el cuidado hacia el propósito de plasmar nuestra meta unida a nuestro deseo.

Seguimos en próximos post.

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