Inicia un tiempo de introspección sobre qué es lo bello, lo placentero, qué no hace felices realmente. Tomarse el tiempo para hacer una evaluación sincera con uno mismo, sobre cuáles son nuestros apegos respecto de las relaciones, situaciones y sobre todo qué es lo que necesitamos para ser felices. No siempre lo sabemos, pero seguro que lo sentimos. Este período están relacionados a acontecimientos internos que sucedieron en el mes de Enero, cuando nos confrontamos a repensar las bases concretas de nuestros proyectos y relaciones. En esta etapa nos introyectamos sobre nosotros mismos para Sentir, para conectarnos con el placer sensible (el Sol está en Tauro y Mercurio Retrograda en Tauro -en el ámbito de Venus-de lo corporal, de los sentidos). Momento ideal para entender qué nos da placer, cuidar de nosotros mismos y desde dónde y cómo nos relacionamos con lo que somos y con lo que internamente sabemos que queremos.

También es momento de ver la realidad tal cuál es, no como juicio valorativo, sino como realidad concreta sobre la cual actuar. Porque en el momento en que tomamos conciencia de la profundidad de nuestra emocionalidad, sentimientos, necesidades y deseos internos, es difícil no seguirlos.

Este proceso tiene mayor intensidad entre el 28 de abril al 10 de mayo y que culmina el 22 de mayo.  Para retomar la profundización del proceso que nos lleva a reordenar nuestras estructuras en pos de encontrar nuestras propias formas a partir del 30 de agosto 2016.

Signos y Ascendentes en Tauro-Escorpio-Acuario y Leo en primer plano;  Géminis y Virgo: Introspección; Cáncer y Piscis: Concientización ; Libra y Sagitario: Confusión y Tensión; Capricornio: Apertura y  Aries: Desconcierto.