En el fin del año astrológico estamos vivenciando dos inicios que evidencian un gran potencial. La luna nueva que se presenta con varios aspectos nos induce a disolver las ambigüedades. Todo lo que actuó como desencadenante de enormes des-conexión y que nos pudo haber llevado a sentirnos  sumergidos en el anhelo de escape (Link) como única vía posible de aplacar el dolor profundo de sentirnos en el sinsentido, podrá quedar asumido, liberado.  De este modo y asumiendo nuestra vulnerabilidad y la de los que nos rodean podremos reconocernos plenamente desde la exquisita unidad de la individuación. Reafirmar la confianza y el compromiso con nuestros proyectos y con las relaciones reales y sinceras, será un acto imprescindible para aplacar los arrebatos que se den ante la premura con la cual queremos encontrar soluciones prácticas (Marte cuadratura Saturno)  que se manifiestan como rebeldía ante el comprender que la vida en el fondo conlleva el desgarro de saber de limites, de esperas y de sostenimientos. En tanto y como parte de este evento, Venus y Mercurio se encuentran unidos (es una hermosa combinación) y como lo están en el signo de Aries nos impulsan a la acción y al encuentro de vías de desarrollo, de valoración y de comunicación que tienen la función de reconvertir la cuadratura entre Marte y Saturno en una excelente oportunidad para responsabilizarnos plenamente en la construcción de nuestro sendero. Pero recordemos que Mercurio ya se encuentra en su periodo anterior a retrogradar (Link con fechas) , con lo cual los tiempos serán más lentos permitiendo que Marte, Saturno y Plutón (los tres) desde Capricornio hagan su trabajo metódico, seguro, de transformación. La exacta unión de La Luna, el Sol y Quirón de este 17 de Marzo y 3 días antes del inicio de Aries (año astrológico), marca fuertemente esta nueva versión a la que estamos arribando con la necesidad de una nueva forma de ser y estar en el mundo. Estamos asistiendo a la inmensa posibilidad de vivencia de la redención sobre nosotros mismos, permitirnos una apertura hacia la comprensión de los deseos, de los anhelos, de los amores y en definitiva de permitir que la vida se manifieste. Este dato es muy importante tenerlo en cuenta para lo que sobrevendrá con el Eclipse del 13 de Julio cuando el trino Marte, Plutón y Saturno se encontrarán retrógrados generando una tensión muy fuerte entre el deber y la necesidad de cuidado interno.

Mariana, Por cualquier consulta pueden dejar un mensaje o enviar mail. Recomiendo leer: Las heridas no se curan, se comprenden. –  ¿Te animás a otro texto de tu vida?